Si coges un libro de historia y lo aprietas con las manos, verás salir por sus costuras regueros de sangre.
Ábrelo.
Leerás que los vencedores siempre apelan a Dios y a la ley y a la verdad y a la patria, pero ganaron porque tenían más fusiles, más cañones, más soldados y generales que estudiaban mejor las líneas negras de los mapas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario