lunes, 8 de junio de 2015

Días.


Sara Herranz

sábado, 6 de junio de 2015

Huellas.


“Ya perdoné errores casi imperdonables, intenté sustituir a personas insustituibles y olvidar a personas inolvidables. Ya hice cosas por impulso. Ya me decepcioné, ya he decepcionado a alguien. Ya abracé para proteger y sonreí cuando no podía hacerlo. Ya hice amigos eternos. Ya amé y me han amado, pero también fui rechazado, también me han amado y no supe amar. Ya grité y me emocioné con tanta felicidad. Ya viví el amor e hice juramentos eternos, pero muchas veces no los cumplí. Ya lloré escuchando una melodía y viendo fotos del pasado. Ya hice una llamada sólo para escuchar una voz, ya pensé que me iba a morir de tanta añoranza y tuve miedo de perder a alguien especial. 

No he pasado por la vida sin dejar huella. Aún hay tiempo para luchar con determinación, abrazar la vida y vivir con pasión, perder con clase, vencer con osadía. La vida es mucho para ser insignificante.“ 

Charles Chaplin 



viernes, 5 de junio de 2015

Todos los libros.

En cierta ocasión escuché a la escritora Ayes Tortosa apelar a la retirada de los libros tóxicos: «con la Literatura ocurre igual que con la Medicina. Si el paciente toma un fármaco equivocado puede empeorar o incluso morir. Y es que lo mismo que el Ministerio de Sanidad retira, de vez en cuando, medicamentos que son perjudiciales para la salud, se deberían de revisar todos aquellos libros tóxicos, plagiados, perdón intertextualizados, clónicos, incoloros, inodoros, insípidos, que sólo sirven para enredar. ¿Cuántos lectores, sobre todo jóvenes, no habrán muerto a causa de un libro tóxico?» Quedé perplejo hasta que el gran escritor Günter Grass me aclaró la cuestión: «incluso los malos libros son libros, y por lo tanto sagrados».

Fernando M. Ortega







jueves, 4 de junio de 2015

Tom Schamp.

Hasta Bélgica con Tom Schamp y sus divertidas ilustraciones...













miércoles, 3 de junio de 2015

I'm letting go...

 ¿Has vivido ya el momento más extraordinario de tu vida?
La mayoría de nosotros responderíamos negativamente a esta pregunta, creyendo que todavía no ha sucedido, pero que en cualquier momento puede suceder. Independientemente de la edad, tendemos a creer que el momento más extraordinario de nuestra vida está por llegar.
Quizás tengamos miedo a que sea demasiado tarde, pero todavía estamos esperando. Pero lo cierto es que, si seguimos sumidos en el olvido -es decir, si vivimos alejados de la atención plena-, ese momento jamás llegará.

Las enseñanzas del Buda afirman, de un modo tan claro como rotundo, que debemos convertir nuestro presente en el momento más extraordinario de nuestra vida. El presente es el momento más maravilloso.
Y lo único que necesitas para transformar tu presente en el momento más extraordinario es la libertad. Lo único que necesitas para ello es liberarte de las inquietudes y preocupaciones que te mantienen atado al pasado y al futuro.

Estás aquí - La magia del momento presente - Thich Nhat Hanh



martes, 2 de junio de 2015

Representaciones.

Las mujeres seguimos siendo representadas en la cultura como “buenas” o “malas”, “santas” o “putas”.  Las primeras se casan, las segundas se quedan solas. Esta amenaza es lo que más nos angustia: la soltería femenina sigue estando estigmatizada y se contempla como una desgracia. Incluso para las mujeres que tienen autonomía económica, la gran amenaza que se cierne sobre nuestras cabezas es la soledad. El divorcio se vive como un fracaso, el matrimonio como un éxito, y siempre de fondo, está la soledad que nos come si no encontramos pareja. Y si la encontramos, también podemos sentirnos igual de solos y solas, especialmente cuando nos aislamos en niditos de amor para olvidarnos del mundo.

La necesidad de afecto nos limita para elegir libremente a alguien como pareja, pero también a la hora de romper una relación que no nos hace felices, de modo que no somos tan libres como quisiéramos. Perdemos la fe en el amor, pero buscamos compañía a cualquier precio.

Vivimos en una sociedad muy romántica, pero poco amorosa: hemos sustituido el calor humano del grupo por la búsqueda de esa persona única y especial que cubra todas nuestras necesidades afectivas. Lloramos de emoción en las bodas, pero la tasa de divorcios aumenta sin cesar.


Coral Herrera



lunes, 1 de junio de 2015

Miradas.

Todavía creo que nuestro mejor diálogo ha sido el de las miradas. Las palabras, consciente o inconscientemente, a menudo mienten, pero los ojos nunca dejan de ser veraces. Si alguna vez he pretendido mentir a alguien con la mirada, los párpados se me caen, bajan espontáneamente su cortina protectora, y ahí se quedan hasta que yo y mis ojos recuperamos la obligación de la verdad. Con las palabras todo es más complejo, pero aún así, si las palabras tratan de engañar, los ojos suelen desmentir a la boca.

Terapia de Soledad. Mario Benedetti.